Necomicón y yo (escrito por Niamh)

Regresar después de seis años, no es nada fácil.
La consabida crisis del 2001, los cacerolazos, los piqueteros, helicópteros que se escapan y pingüinos perpetuos no son pocas circunstancias en la vida de un país.
Una convención tampoco queda ajena a estos avatares.
Y, obvio, si en el medio hubo tanto movimiento negativo económico, reingresar al ambiente será complejo.

Una inmensa alegría me dió saber que regresaba a la palestra una de las expos mas recordadas por el ambiente comiqueril de acá.
Necomicón.

Mucha expectativa por el retorno, mucha gente famosa en el encuentro se anunciaba, y yo hacía años (muchos) que no visitaba Necochea.
Y me habían hablado tanto y tan bien sobre esta expo....

Así que, a pesar de los problemas familiares (a último momento pensé no asistir, pero consideré fea la actitud) hacia allí me dirigí con mi vástaga Micaela.
Llegamos el viernes a las 7 y poco más, casualmente viajamos con Casanova, alma mater de Domus (una EXCELENTE editorial argenta) quien además se alojaría en el mismo hotel que nosotras.

Lindo el hotel Gala, sobre todo calentito, copada la gente que atendía, ricos desayunos....(esa parte estuvo excelente)

Necochea se me antojó una ciudad muy enorme.
Tiene más de un centro comercial: el "viejo" (donde está el Hotel), y el netamente turístico (cerrado por ser invierno, prácticamente todo con persianas bajas :( )
Lamentablemente no había mucho para recorrer desde el hotel a la convención.
Posiblemente fuera el frío marítimo que helaba a más no poder el que provocaba esa sensación de "quiero estar en alguna cuchita, sea habitación de hotel, sea expo".
La playa estaba a unas 40 cuadras de la biblioteca.
Por supuesto, fuimos para allá, pero recién el domingo.
No se puede dejar de visitar el mar estando tan cerquita.

El mismo viernes (como pasa en todas las convenciones) se habilitaba el lugar para armar stands.
El público arribaría a eso de las 12 hs.

Ëramos unos cuantos: estaba ya el de Milenio Oscuro, comiquería propiedad de los organizadores, con una amplia gama de cartas Magic y similares que harían las delicias de muchos, más gashapones variados (que harían las delicias de Miki)
Domus (Martín C. estuvo tempranito), Comiqueando (Fede llevó otras obras para vender, entre ellas el impagable Nuggu y los cuatro -Mazitelli/Alcatena), Thalos y merchandising de Los Simpsons, Camulus (que regresaba a la publicación en papel), y a estos se sumaron más tarde Dies Mercuri, La Productora, amigos con stands comerciales como Kamandy y Duveis (lamentablemente, no sabía que ellos iban. Vendemos casi lo mismo. Está todo más que bien con ellos, los conozco de muchas convenciones, pero....un stand comercial va a vender....y si en una expo chica se repiten temas....comercialmente no cierra)

Muchos artistas, algunos conocidos por mí: Rubén Meriggi, Quique Alcatena, Horacio Lalia, Max Aguirre (que llegó el sábado y se alojó en el mismo hotel Gala), Jok, Mallea, Gervasio, Aón, Mosquito (estos cuatro llegaron el sábado también), Gustavo Sala (hizo una caricatura mía tan......salística...)
También estaba presente una leyenda de los dibujantes nacionales, Ricardo Villagrán, a quien conozco de vista nomás.
Y conocí a Patricia Breccia, persona que me cayó muy bien, me pareció muy sencilla y accesible (la verdad, pensaba que sería todo lo contrario...y me equivoqué)

Como notarán, mucha gente interesante, muchos nombres conocidos, así que al menos las charlas off escenario estaban garantizadas (tomar mate con Lalia...no tiene precio)

En planta baja había una muestra de trabajos de varios de estos artistas, sumado el autor de El Ojo Blindado (Manuel "Waccio Skater" Gutiérrez), donde los concurrentes podían visualizar por qué Meriggi, Villagrán, Alcatena, Lalia, Breccia, Sala, son talentos nacionales.
También un cinema, por el que pasaron hitos cinéfilos como Monthy Pyton and the holy grail; The Call of Cthulhu (la GENIAL peli muda hecha por los amigos de la H.P. Lovecraft Historical Society -gente que auspició Lovecraftiana el año pasado, gracias a los tejes y manejes geniales de Carmilla -Agustina, pero bue....algunos le decimos Condesa Carmi-); Metrópolis (sin comentarios, buenísima) y muchos títulos más sobre animación.
El domingo hubo una proyección genial, de la que ya les comentaré más abajo (merece renglón aparte)
Como les contaba, en el primer piso del CC perteneciente a la Biblioteca "Andrés Ferreyra", estábamos los stands.
También como les conté, la mayoría eran editoriales (las más pujantes y comiqueras) y autoeditados (para mí, los que mantienen viva la llama historietil a pesar de los sucesos antipáticos de nuestra economía) y éramos cuatro comerciales (yo fui con Diva Pins y el Freaky Store, tomados como excusa más que nunca para viajar).
Así las cosas, todo estaba preparado para recibir a mucha gente.
Pero...tal vez por el tiempo frío, tal vez por una feria de colectividades que se desarrollaba no supe nunca dónde, tal vez porque el precio de la entrada para un retorno era excesivo (cinco pesos per cápita), tal vez porque lo que fuera...la gente casi no estuvo presente.
Una pena, porque como dije, había muchas atracciones interesantes, muchas ofertas editoriales, muchos pins, remeras, cosillas, cartas...
El sábado la cosa empezaba a mi entender demasiado temprano: 10 de la mattina.
La gente seguía brillando por su ausencia, los que asistían eran casi los mismos del viernes a la tarde, y serían los mismos que el domingo.
Obvio, algunos más se sumaron, sobre todo durante la última tarde, pero la casa era grande y ansiosa por recibir más visitas.
Por lo que me contaron, hubo un asado, sólo para algunos (la mayoría de gente de stands y artistas, no me conté entre ninguno de ellos...jo....y eso que soy del palo, man, aunque haya ido con cosas comerciales)

El domingo nuevamente la expo empezaba a las 10, pero la mayoría de standcieros llegó (amos) más tarde.

Hubo un poco más de gente a la tarde y para cuando llegó el cierre, creo que se tocó el número más alto de asistencia.

A propósito, el cierre estuvo coronado por un corto realizado por el émulo de Ed Wood necochense, Guillermo Allen.
Algunos dirán que el tipo está loco, otros que es cuasi ridículo lo que hace y nosotros que es un reverendo capo de la bizarreada.
La filmación se titula "Víctimas y victimarios de lo desconocido" y sólo diré que es un homenaje a los actores que alguna vez personificaron a Drácula, Frankestein y el Hombre Lobo.
Muchos guiños para quienes gustamos de este tipo de pelis, hechas a pulmón, con bajísimo presupuesto (ínfimo).
Tres cosas geniales:
La silueta contraluz de quien filmaba en medio del cementerio; el vampiro de gomaespuma y los hilos de tanza; el brazo del que tenía el lanzallamas del final dentro del cuadro.

En síntesis, Necomicón ha regresado.
Si la cosa sigue en los años que vienen, se sabrá sobre la marcha.
Sería genial que la gente de Necochea y alrededores apoyara la expo.
Estaría bueno ajustar el horario, las 10 de la mañana es muy temprano para largar.
La entrada tal vez sea un poco excesiva (siempre hago la misma cuenta, una familia de tres gastaría $15.- sólo para ingresar. El comprar además algo adentro es como complejo y oneroso)
Esas cuestiones ayudarían a mejorar la próxima, desde mi humilde visión.

Por lo pronto, espero y celebro el retorno.
Ojalá sea el inicio de muchas ediciones más.