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Un millón de lágrimas
Manga - Lunes, 11 de diciembre de 2006
Con la salida al mercado de Un millón de lágrimas podríamos decir que finaliza el "2006, el año Yuana Kazumi en España". A lo largo de estos meses hemos asistido a la publicación por parte de Planeta DeAgostini de las cuatro primeras series de la autora. La obra que nos ocupa, a pesar de ser la última en llegarnos, es la segunda obra de la autora, por lo que ahora, ya se ha rellenado el único hueco que nos quedaba en la bibliografía de Kazumi.
Al ser esta la cuarta reseña sobre la misma autora en poco tiempo, para aquellos despistados que aún no conozcan a la emergente figura de Yuana Kazumi, os recomendamos que echéis un vistazo a los enlaces que os incluimos en esta página, donde podréis encontrar los comentarios que hicimos de sus anteriores obras, así como de los datos que tenemos sobre su persona.
El argumento
Hiromu Nishizawa es un estudiante de secundaria completamente normal que vive feliz dedicando su tiempo por igual al baloncesto y a su novia. Un mal día, descubre que su compañero Tetsuya ha desaparecido sin dejar rastro. Lo más extraño del asunto no es eso, sino que todo el instituto parece no recordar absolutamente nada de él. Nadie sabe quién es Tetsuya. Es como si nunca hubiera existido. Investigando, descubrirá que la única persona que recuerda a su amigo, es un desconocido al que vió hablando horas antes de que desapareciese. Este siniestro personaje reconocerá haberse "comido" a su amigo, añadiendo, eso sí, que estaba "delicioso".
Los problemas para Hiromu no habrán hecho más que comenzar, pues, a partir de ahí, irá descubriendo la verdadera naturaleza de ese misterioso ser que parece saber mucho más sobre el pasado de Hiromu que él mismo. Descubrirá que su novia no es su novia y que él mismo no es realmente quién cree ser. El descubrimiento de la existencia de una extraña raza de seres que se alimentan de la misma esencia y recuerdos de los humanos, hará que el mundo de Hiromu se derrumbe por completo y dé un giro de 360º a la vida que llevaba hasta el momento. Es entonces cuando se verá forzado a tomar la gran decisión: elegir entre su vida pasada y la actual.
La Kazumi más melancólica
Como ya hemos apuntado en otras reseñas, todas las obras de Kazumi hasta la fecha incluyen cuatro ingredientes básicos: fantasía, romance, intriga y algunas gotas simpáticas o cómicas. Un millón de lágrimas no es una excepción: hay fantasía (los personajes son una espécie de vampiros), hay intriga (iremos descubriendo el túrbio pasado de los personajes poco a poco) y sobre todo, mucho romance (todas las acciones que mueven a los protagonistas, por muy descabelladas que sean, lo hacen por continuar disfrutando del amor). Eso sí, sin duda, en Hyakuman no tsubu no namida (nombre original de la obra), es en la que menos toques humorísticos encontraremos. Ya desde un principio, la historia estará impregnada de una atmósfera tensa, y a medida que vaya avanzando la trama, la desesperación e incluso la tragedia, serán la nota predominante en la narración. Así como en su primera obra La canción del sueño predominaba la fantasía futurista y los personajes también lo pasaban mal, la moraleja era un canto a la esperanza. En esta segunda obra encontraremos lo contrario, unos personajes con un pasado trágico que por mucho que lo intenten, no conseguirán vivir una vida plena sino que se encontrarán sumergidos en una farsa eterna que no les proporcionará felicidad o tranquilidad de espirítu.
En cuanto al apartado gráfico se refiere, será interesante ver cómo Kazumi todavía estaba en el proceso de encontrar su propio estilo; le faltaba únicamente ese puntito de depuración que encontraremos posteriormente en La flor del sueño eterno y en Haru Hana, donde la autora ya habrá encontrado un estilo propio de trazo sencillo y nítido que da a sus personajes un aire inconfusible. A pesar de que podría achacársele alguna imperfección a la hora de dar movimiento a las escenas, sin lugar a dudas, (Kazumi)) es una gran ilustradora que dará que hablar en el futuro y que ya goza de muchos admiradores (y detractores). Si hay algo que no se puede discutir, es que es fácil reconocer una obra de la autora viendo únicamente la portada, eso es algo que pocos pueden decir.
A pesar de que Haru Hana y La flor del sueño eterno hayan sido las obras más vendidas de la autora, a mi parecer, es Un millón de lágrimas la historia más dura y que más sentimientos puede transmitir al lector, puesto que, a pesar de ser un argumento cargado de tristeza, el conjunto no deja de resultar bastante bello al final. Probablemente, Planeta haya decidido publicar antes que ésta, las otras dos obras que antes comentábamos, quizás por ser ellas un poco más desenfadadas que ésta que nos ocupa y no dar la sensación de que Kazumi es una autora melancólica. Impresión a la que podíamos haberllegado si hubiésemos leído seguidas La canción del sueño y Un millón de lágrimas. Idea completamente errónea, puesto que Yuana ha demostrado que puede desenvolverse en cualquier tipo de narración con soltura, ya sea desde la narración futurista, el drama, la intriga o el shôjo más convencional.
El formato de la edición que nos trae Planeta es idéntico al de las obras anteriormente publicadas de la misma autora: Haru Hana y La flor del sueño eterno, 176 páginas, tamaño tankôbon, tapa blanda con sobrecubiertas y sentido de lectura oriental. Al igual que ocurría en La flor del sueño eterno, las primeras páginas de la historia originalmente eran en color y a acuarela, por lo que al pasar al blanco y negro, pierden toda la belleza que atesoraban en un principio y se convierten en simples dibujos emborronados. Una verdadera lástima porque, como no nos cansaremos de repetir, Kazumi es una gran ilustradora que maneja a la perfección el color como habréis podido comprobar los que hayáis visitado su página web (que ella misma facilita en la historieta cómica autobiográfica que encontraréis al final del tomo).
Así pues, sólo nos queda esperar la publicación el año que viene de su última obra finalizada, Kachin★Co., para que España sea el único país del mundo (excepto Japón, claro) en tener el Repóker completo de obras de Yuana Kazumi a disposición de sus lectores. Si bien es cierto que Kachin★Co. volverá a ser una obra corta de únicamente 2 tomos, los fans no tienen de qué preocuparse. En junio de 2006 en la revista Asuka, comenzó a publicarse la historia en la que actualmente trabaja la autora, titulada 惑星ドロップス (Wakusei Doroppusu, que en castellano sería El Planeta Drops) y el primer tomo recopilatorio verá la luz en tierras niponas allá por enero de 2007. Esperemos que Planeta haga un esfuerzo y nos traiga a la autora para alguno de los próximos salones del manga, ¿qué menos, no?, se podría decir que España es su segunda casa.
Ficha
Título español: Un millón de lágrimas
Título original: ひゃくまんつぶの涙 ~ Hyakuman tsubu no namida
Autora: Yuana Kazumi
Edición original: Asuka de Kadokawa Shoten
Edición española: Planeta deAgostini
Formato: Tomo de 176 páginas, manga 11 x 18 cms, tapa blanda con sobrecubiertas, sentido de lectura japonés, onomatopeyas sin traducir.
Tomos: 2
Precio: 7,50 €
Al ser esta la cuarta reseña sobre la misma autora en poco tiempo, para aquellos despistados que aún no conozcan a la emergente figura de Yuana Kazumi, os recomendamos que echéis un vistazo a los enlaces que os incluimos en esta página, donde podréis encontrar los comentarios que hicimos de sus anteriores obras, así como de los datos que tenemos sobre su persona.
El argumento
Hiromu Nishizawa es un estudiante de secundaria completamente normal que vive feliz dedicando su tiempo por igual al baloncesto y a su novia. Un mal día, descubre que su compañero Tetsuya ha desaparecido sin dejar rastro. Lo más extraño del asunto no es eso, sino que todo el instituto parece no recordar absolutamente nada de él. Nadie sabe quién es Tetsuya. Es como si nunca hubiera existido. Investigando, descubrirá que la única persona que recuerda a su amigo, es un desconocido al que vió hablando horas antes de que desapareciese. Este siniestro personaje reconocerá haberse "comido" a su amigo, añadiendo, eso sí, que estaba "delicioso".
Los problemas para Hiromu no habrán hecho más que comenzar, pues, a partir de ahí, irá descubriendo la verdadera naturaleza de ese misterioso ser que parece saber mucho más sobre el pasado de Hiromu que él mismo. Descubrirá que su novia no es su novia y que él mismo no es realmente quién cree ser. El descubrimiento de la existencia de una extraña raza de seres que se alimentan de la misma esencia y recuerdos de los humanos, hará que el mundo de Hiromu se derrumbe por completo y dé un giro de 360º a la vida que llevaba hasta el momento. Es entonces cuando se verá forzado a tomar la gran decisión: elegir entre su vida pasada y la actual.
La Kazumi más melancólica
Como ya hemos apuntado en otras reseñas, todas las obras de Kazumi hasta la fecha incluyen cuatro ingredientes básicos: fantasía, romance, intriga y algunas gotas simpáticas o cómicas. Un millón de lágrimas no es una excepción: hay fantasía (los personajes son una espécie de vampiros), hay intriga (iremos descubriendo el túrbio pasado de los personajes poco a poco) y sobre todo, mucho romance (todas las acciones que mueven a los protagonistas, por muy descabelladas que sean, lo hacen por continuar disfrutando del amor). Eso sí, sin duda, en Hyakuman no tsubu no namida (nombre original de la obra), es en la que menos toques humorísticos encontraremos. Ya desde un principio, la historia estará impregnada de una atmósfera tensa, y a medida que vaya avanzando la trama, la desesperación e incluso la tragedia, serán la nota predominante en la narración. Así como en su primera obra La canción del sueño predominaba la fantasía futurista y los personajes también lo pasaban mal, la moraleja era un canto a la esperanza. En esta segunda obra encontraremos lo contrario, unos personajes con un pasado trágico que por mucho que lo intenten, no conseguirán vivir una vida plena sino que se encontrarán sumergidos en una farsa eterna que no les proporcionará felicidad o tranquilidad de espirítu.
En cuanto al apartado gráfico se refiere, será interesante ver cómo Kazumi todavía estaba en el proceso de encontrar su propio estilo; le faltaba únicamente ese puntito de depuración que encontraremos posteriormente en La flor del sueño eterno y en Haru Hana, donde la autora ya habrá encontrado un estilo propio de trazo sencillo y nítido que da a sus personajes un aire inconfusible. A pesar de que podría achacársele alguna imperfección a la hora de dar movimiento a las escenas, sin lugar a dudas, (Kazumi)) es una gran ilustradora que dará que hablar en el futuro y que ya goza de muchos admiradores (y detractores). Si hay algo que no se puede discutir, es que es fácil reconocer una obra de la autora viendo únicamente la portada, eso es algo que pocos pueden decir.
A pesar de que Haru Hana y La flor del sueño eterno hayan sido las obras más vendidas de la autora, a mi parecer, es Un millón de lágrimas la historia más dura y que más sentimientos puede transmitir al lector, puesto que, a pesar de ser un argumento cargado de tristeza, el conjunto no deja de resultar bastante bello al final. Probablemente, Planeta haya decidido publicar antes que ésta, las otras dos obras que antes comentábamos, quizás por ser ellas un poco más desenfadadas que ésta que nos ocupa y no dar la sensación de que Kazumi es una autora melancólica. Impresión a la que podíamos haberllegado si hubiésemos leído seguidas La canción del sueño y Un millón de lágrimas. Idea completamente errónea, puesto que Yuana ha demostrado que puede desenvolverse en cualquier tipo de narración con soltura, ya sea desde la narración futurista, el drama, la intriga o el shôjo más convencional.
El formato de la edición que nos trae Planeta es idéntico al de las obras anteriormente publicadas de la misma autora: Haru Hana y La flor del sueño eterno, 176 páginas, tamaño tankôbon, tapa blanda con sobrecubiertas y sentido de lectura oriental. Al igual que ocurría en La flor del sueño eterno, las primeras páginas de la historia originalmente eran en color y a acuarela, por lo que al pasar al blanco y negro, pierden toda la belleza que atesoraban en un principio y se convierten en simples dibujos emborronados. Una verdadera lástima porque, como no nos cansaremos de repetir, Kazumi es una gran ilustradora que maneja a la perfección el color como habréis podido comprobar los que hayáis visitado su página web (que ella misma facilita en la historieta cómica autobiográfica que encontraréis al final del tomo).
Así pues, sólo nos queda esperar la publicación el año que viene de su última obra finalizada, Kachin★Co., para que España sea el único país del mundo (excepto Japón, claro) en tener el Repóker completo de obras de Yuana Kazumi a disposición de sus lectores. Si bien es cierto que Kachin★Co. volverá a ser una obra corta de únicamente 2 tomos, los fans no tienen de qué preocuparse. En junio de 2006 en la revista Asuka, comenzó a publicarse la historia en la que actualmente trabaja la autora, titulada 惑星ドロップス (Wakusei Doroppusu, que en castellano sería El Planeta Drops) y el primer tomo recopilatorio verá la luz en tierras niponas allá por enero de 2007. Esperemos que Planeta haga un esfuerzo y nos traiga a la autora para alguno de los próximos salones del manga, ¿qué menos, no?, se podría decir que España es su segunda casa.
Ficha
Título español: Un millón de lágrimas
Título original: ひゃくまんつぶの涙 ~ Hyakuman tsubu no namida
Autora: Yuana Kazumi
Edición original: Asuka de Kadokawa Shoten
Edición española: Planeta deAgostini
Formato: Tomo de 176 páginas, manga 11 x 18 cms, tapa blanda con sobrecubiertas, sentido de lectura japonés, onomatopeyas sin traducir.
Tomos: 2
Precio: 7,50 €
posted by Jorge Vila at
5:34 p. m.
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